A Donald Trump nadie le podrá negar que casi todo lo que sale de su boca se convierte en viral. Y lo último ha sido su mención al general John Pershing, al que citó en su cuenta de twitter tras los atentados de Barcelona, y puso como ejemplo de como se debería luchar contra el terrorismo. «Estudien lo que Pershing les hacía a los terroristas cuando les capturaba. No hubo más terrorismo islamista en 35 años», escribió el presidente estadounidense.

Trump se estaba refiriendo a un episodio (cuya veracidad nunca han confirmado los historiadores) ocurrido durante la campaña de EE UU en Filipinas contra las tribus musulmanas de Joló y Mindanao, a finales del siglo XIX. Se cuenta que antes de fusilar a once destacados líderes rebeldes, Pershing ordenó empapar las balas con sangre de cerdo y, luego, le perdonó la vida a uno de ellos para que contara al resto de jefes guerreros la suerte que les esperaba.

Veraz o no, ese episodio solo es una anécdota en la intensa biografía de este militar. John J. Pershing nació en Misuri en 1860. Su primera vocación fue la de maestro, y como tal comenzó a ejercer en su juventud, creando una escuela para niños negros. Su imposibilidad de acceder a una universidad de prestigio le llevó a ingresar en West Point, no tanto por el deseo de convertirse en militar profesional, como por el hecho de que había escuchado que la educación universitaria que se impartía en la academia militar era también excelente.

Su primer destino lo recibió en 1886, siendo enviado a un fuerte de Nuevo México a luchar contra los apaches. En 1894 se encargó de crear el 10º regimiento de caballería, el primero formado por soldados negros, que recibieron el nombre de Buffalo Soldiers. Desde entonces, a Pershing se le conoció popularmente con el apodo de Black Jack.

En 1898 participó en la guerra de cuba y posteriormente, en 1909, tras ser ascendido a coronel, fue enviado a Filipinas para liderar la lucha contra las tribus musulmanas rebeldes de Joló y Mindanao. Fue entonces cuando supuestamente se produjo el episodio al que se refería Trump.

En 1916, siendo ya general, se le ordenó que dirigiera una expedición de castigo en México para capturar a Pancho Villa, quien había atacado la ciudad de Columbus en Texas. Pershing llegó a entrevistarse con Villa y le invitó a visitar Estados Unidos, pero nunca llegó a capturarle. La entrada de Estados Unidos en la I Guerra Mundial era inminente y el gobierno no quería tener abiertos dos frentes al mismo tiempo, así que el general recibió la orden de regresar a territorio estadounidense para ponerse al frente de las tropas que irían a Europa a luchar contra los alemanes.

Tras su participación en la I Guerra Mundial recibió el rango de General de Todos los Ejércitos, que no había ostentado nadie desde George Washington. Tras su retiro en 1920 los republicanos le propusieron ser candidato a la casa Blanca, pero el rechazó la oferta por su amistad con el presidente demócrata Woodrow Wilsom.

Falleció en 1948, tres años después de que acabara la II Guerra Mundial, en la que brilló un general llamado George S. Patton, que había servido como teniente a sus órdenes en Filipinas y México.

Vicente Fernández López