En la década de 1960, arqueólogos rusos descubrieron en la región de Vladimir, situada en el oeste de Rusia, las tumbas de dos adolescentes de ambos sexos. Los jóvenes de unos diez y trece años de edad (el varón es el mayor de ambos), pertenecían al llamado pueblo Sungir, y fueron enterrados juntos. Los restos de estos dos muchachos de hace treinta mil años (de los que se piensa que eran hermanos) estaban cubiertos con pieles engalanadas con huesos de mamuts.
Ahora, especialistas de la Russian Academy of Sciences en colaboración con técnicos del Visual Studio, han realizado una reconstrucción de los rostros de estos dos adolescentes a partir de sus cráneos y de los datos facilitados por antropólogos y forenses. Y el resultado puede apreciarse en las imágenes.
El yacimiento de Sungir es en el que se han encontrado los restos más antiguos de Homo sapiens modernos en Europa. Otro estudio reciente realizado a los restos humanos allí encontrados, ha revelado que estos antiguos pobladores de nuestro continente evitaban la endogamia en la medida de lo posible, y (a diferencia de los neandertales) no se apareaban con parientes muy cercanos.
Vicente Fernández López