Lamentablemente, muchas veces la valía de las personas no se juzga en función de sus acciones, sino de elementos totalmente secundarios que no tienen ninguna relación con ellas. Y eso es lo que ha puesto de manifiesto un experimento realizado por la Universidad de Abertay, en Escocia, que pone de manifiesto que el maquillaje que usan las mujeres puede afectar a cómo perciben los demás sus capacidades para el liderazgo.

Los investigadores realizaron un estudio con voluntarios de ambos sexos, a los que les mostraron varios rostros de mujeres sin maquillar. Luego, mediante manipulación digital, fueron añadiéndoles maquillaje, aumentsndo la intensidad del mismo hasta dieciséis veces. Las personas que participaban en la prueba tenían que calificar cómo valoraban la capacidad de liderazgo de dichas mujeres en cada una de esas dieciséis etapas.

Y el resultado fue que, mayoritariamente, tanto los voluntarios masculinos como los femeninos, juzgaban que cuanto más maquilladas estaban, menos capaces les parecían para ejercer algún tipo de liderazgo. Por supuesto, este experimento tiene limitaciones que no permiten sacar conclusones tajantes de ningún tipo, pero sus resultados son interesantes proque ponen de relieve la existencia de estereotipos para juzgar la capacidad de una persona en función de algo tan banal cómo su apariencia.

Está claro que el maquillaje ni resta ni aporta un ápice a la capacidad de liderazgo de ninguna mujer, pero este estudio pone de manifiesto que en la mente de muchas personas sigue arraigado un gran prejuicio contra las mujeres que «se pintan demasiado» (expresión que, por supuesto, responde a criterios subjetivos y por eso la entrecomillamos).

Fuente: EurekAlert.

Vicente Fernández López