Los dientes de leche de los niños comienzan a aparecer en torno a los seis meses de edad, y esa dentadura primaria suele estar completa cuando cumplen los tres años. Pero la niña de la foto es un caso aparte. Se trata de una bebé inglesa llamada Isla-Rose, y tenía tan solo doce días de vida cuando sus padres descubrieron que ya le había salido un diente.

La pequeña es uno de los casos que de vez en cuando se producen del llamado diente natal, que es la aparición prematura de algunas piezas dentales. No es un fenómeno corriente, y se calcula que se da en uno de cada 2.500 nacimientos. Y lo habitual es que estos bebés tengan parientes cercanos que también desarrollaron dientes natales, lo que sugiere que puede haber una causa genética.

Lo corriente es que los médicos extraigan la piezananda más descubrirla. ¿La causa? Suelen ser dientes que no tienen raices, y eso los hace muy peligrosos, porque pueden desprenderse, con el consiguiente riesgo de que el recién nacido se trague la pieza. Eso sí, ese diente ya no volverá a salir cuando el pequeño desarrolle la dentadura de leche.

Para los antiguos romanos, el diente natal era un buen presagio para el recién nacido. Aunque en otras culturas era considerado una señal funesta.

fuente: LiveScience.

Vicente Fernández López