Olvidémonos de lucir torsos morenos y cabellos teñidos de rubio platino. En el futuro, surfear (un deporte maravilloso, por otra parte), puede ser una experiencia estéticamente muy diferente a cómo la conocemos hoy. O, al menos, así lo ha imaginado el fotgógrafo Michael Dyrland en una espectacular serie de imágenes en las que fantasea con cómo será surfear en los mares y océanos contaminados. Unas fotos que pretenden hacernos reflexionar sobre la manera en que estamos tratando a nuestros mares.