Jakob Fugger, más conocido como Jakob el rico, promovió un proyecto insólito que a día de hoy aún se mantiene. Su intención era construir viviendas sociales de modo altruista con el fin de dar cobijo a jornaleros, artesanos y otras personas de Augsburgo con recursos limitados.
El conjunto residencias se conoce como Fuggerei y cuenta con 147 apartamentos de 60m2, 60 casas, la Iglesia de San Marcos y un edificio administrativo. Las condiciones para acceder a esta clase de vivienda son exactamente las mismas que en 1520: haber residido durante al menos dos años en la ciudad, ser de fe católica e indigente sin deuda.
Desde hace siglos, el lugar se ha convertido en uno de los destinos de Augsburg más populares. Por solo 4 €, los visitantes pueden hacer un recorrido por la comunidad, incluyendo la visita de un piso deshabitado que se ha dejado para fines turísticos.
El alquiler aquí cuesta 0,88 céntimos de euro por un año completo.