Los manuscritos medievales están repletos de imágenes fascinantes. Pero hay unas que intrigan especialmente a los historiadores. Y son aquellas que muestran escenas (generalmente de torneos) protagonizadas por caracoles gigantes. ¿Por qué esa insistencia a mostrar a valerosos caballeros peleando con estas criaturas?

Lo cierto es que nadie sabe que significan esos dibujos, si es que significan algo. Desde hace más de un siglo se han esgrimido numerosas teorías para intentar explicarlo, pero ninguna ha sido unánimemente aceptada. Para algunos investigadores, el caracol podría ser un símbolo de la resurrección de Cristo. Hay también quién cree que se trata de un recurso humorístico para satirizar a los lombardos, a quienes  los británicos del siglo XIII se referían con el apodo de «los arrastrados».

Una historiadora llamada Lisa Spangenberg propuso que los caracoles eran en realidad una representación del Salmo 58 del Antiguo Testamento, que dice: “Como el caracol, que se disuelve según se arrastra, como los que nacen muertos, que nunca ven el sol”.

Aunque podría ser que todos los expertos en historia medieval estén equivocados, y la realidad se acerque más a lo que piensan algunos usuarios de internet, que afirman que todo pudo ser la broma de algún monje copista y que, posteriormente, como si fuera un primitivo meme, otros muchos la imitaron.

Todas las hipótesis siguen abiertas.

Imágenes: British Library. Licencia. Creative commons.