Esta semana, en la conferencia Inspire, llevada a cabo por Microsoft, el gigante informático mostró cómo es posible no solo crear un holograma increíblemente realista de una persona, sino también hacer que este hable otro idioma con la propia voz de la persona.
La demostración, realizada en Las Vegas, fue posible gracias a una combinación de dos tecnologías existentes: realidad mixta y conversión neural de texto a voz. ¿La consecuencia? Un futuro en el que la tecnología disminuye notablemente las barreras existentes en la comunicación humana.
El primer paso para llegar a esto fue crear el holograma de tamaño real, aparentemente idéntico de la conferenciante, la ejecutiva de Microsoft Julia White. Para ello se capturó la imagen de White mediante realidad mixta (una combinación de realidad virtual y grabación convencional) y se filmó la presentación de White en inglés. Con esto bastaría para que cualquiera con unas gafas de RV vea a White pronunciando su discurso. Pero faltaba un paso: que hablara otro idioma. Para ello se utilizó la tecnología de conversión neural de texto a voz. Esta herramienta convierte el texto en una voz generada por un ordenador, pero muy similar, casi indistinguible, de la humana. Y luego tradujo el texto al japonés, aunque puede hacerlo en más de 100 idiomas.
Las aplicaciones de esta tecnología son infinitas y eliminan muchas barreras en la comunicación. Desde la docencia o la medicina hasta el cine o el turismo. Y luego está el futuro: lentillas que eliminan la necesidad de usar las gafas de realidad virtual o un traductor en el bolsillo.
Juan Scaliter