La mayoría de los móviles lleva ahora cámaras estupendas para sacar fotos y, cada vez más, ópticas suficientes para grabar vídeo. Suma a la ecuación que los terminales empiezan a tener WiFi
y verás abrirse un universo de posibilidades. La serie N de Nokia, por ejemplo, monta cámaras de hasta 5 megapíxeles.
Redacción QUO