Hasta ahora, los cardiólogos nunca habían explorado la posibilidad de que las células fuera del corazón pudieran participar en la curación y reparación cardíaca después de una lesión. A diferencia de otros órganos, el corazón tiene una capacidad muy limitada para repararse a sí mismo, la principal razón por la que un tercio de las muertes a nivel global se deben a enfermedades del corazón. El estudio dirigido por Paul Kubes y Paul Fedak, se han publicado en la revista Immunity.
Los autores descubrieon que una célula específica, un macrófago de la cavidad pericárdica, llamado Gata6 +, ayuda a curar un corazón lesionado en ratones. La célula fue hallada en el líquido pericárdico (el saco que rodea el corazón) de un ratón con lesión cardíaca. Las mismas células también se encontraron dentro del pericardio humano de personas con corazones lesionados, lo que confirma que las células de reparación ofrecen la promesa de una nueva terapia para pacientes con enfermedades cardíacas.
«Nuestro descubrimiento de una nueva célula que puede ayudar a curar el músculo cardíaco lesionado abrirá la puerta a nuevas terapias y ayudará a los millones de personas que padecen enfermedades cardíacas – explica Fedak –. Siempre supimos que el corazón se encuentra dentro de un saco lleno de un fluido extraño. Ahora sabemos que este líquido pericárdico es rico en células curativas. Estas células pueden ser el secreto para reparar y regenerar el nuevo músculo cardíaco. Las posibilidades de nuevos descubrimientos y nuevas terapias innovadoras son emocionantes e importantes”.
El próximo paso es realizar un estudio más amplio sobre la reparación del corazón humano, el objetivo es encontrar nuevas terapias potenciales para mejorar la reparación del corazón.
Juan Scaliter