El terremoto producido en la zona centro sur de Chile fue el quinto más violento registrado por la sismología moderna, con sus 8,8 en la escala Richter. Un grupo de científicos de varias universidades chilenas, alemanas y francesas ha estudiado las consecuencias que tuvo. Las conclusiones, publicadas en la revista Science, confirman que el sismo fracturó una extensa falla a lo largo de la costa chilena.
En cuanto a sus efectos en la tierra costera, se produjo una mayor elevación en el sur y un hundimiento de la superficie en el norte. Según los investigadores, dirigidos por Marcelo Farías, de la Universidad de Chile, los datos ayudarán a geólogos y sismólogos a obtener un conocimiento más profundo sobre lo qué desencadena los grandes terremotos.
Para realizar su investigación, los científicos realizaron mediciones de 33 sitios relacionados con el terremoto, dentro del siguiente mes del desastre. Las mediciones revelan que las elevaciones de tierra ocurrieron más cerca de la costa, mientras que el hundimiento ocurrió más tierra adentro. Este patrón es generalmente similar a las mediciones hechas tras otros grandes terremotos, y con un salto de falla que yace a lo largo de una sección de 500 km. de la costa chilena que coincide con terremotos previos en 1835 y 1928.
Redacción QUO