El Instituto Internacional de Investigación del Arroz (IRRI), con sede en Los Baños (Filipinas) ha recibido el Premio Fundación BBVA Fronteras del Conocimiento 2010 por combatir la pobreza y el hambre mediante avances en ciencias agrarias. Se trata de un centro de investigación y formación que ha contribuido de forma decisiva al aumento de la producción de arroz, un alimento fundamental en la lucha contra el el hambre en el planeta. Su director, Robert Zeigler, contesta a nuestras preguntas.

¿Se pueden aplicar a otros productos sus avances con el arroz? ¿Cuáles serían los siguientes alimentos en la lucha contra la pobreza y el hambre?

La investigación del IRR se centra en el arroz, porque es el cultivo alimentario más importante del mundo y proporciona comida a 3.000 millones de personas todos los días. Más del 60% de las personas infraalimentadas del planeta viven en Asia y dependen de él como alimento básico. La importancia del arroz también está aumentando en África y Latinoamérica.

Algunas de nuestras tecnologías y procedimentos se pueden aplicar a otros cultivos. Por ejemplo, el Banco del Conocimiento del Arroz (Rice Knowledge Bank) -una recopilación online de las mejores prácticas para producirlo- se ha utilizado también para el trigo y el maíz.

Ustedes custodian el Banco Internacional de Genes del Arroz, ¿cuál es su objetivo y por qué es importante garantizar el acceso de toda la humanidad a los recursos genéticos?

El Banco Internacional de Genes del Arroz (IRG), custodiado por el IRRI, alberga más de 112.000 tipos de este cereal, e incluye variedades modernas y tradicionales, y otras silvestres emparentadas con él. Es la mayor colección de diversidad genética de arroz del mundo. Países de todo el planeta envían arroz al IRRI para que esté conservado en un lugar seguro y para compartirlo por el bien común.

El IRRI gestiona la colección de acuerdo con el Tratado Internacional de Recursos Genéticos Vegetales para la Alimentación y la Agricultura, con el objetivo de garantizar que los beneficios de la diversidad genética del arroz se reparten de manera responsable. Nosotros proporcionamos muestras gratuitas de distintas variedades de semillas de arroz a cualquier potencial usuario que las solicite, según las condiciones del tratado, para que pueda emplearlas para criar nuevas variedades de arroz con rasgos mejorados.

Con los tremendos avances en biología molecular y genética, apenas estamos empezando a comprender el alcance de los nuevos rasgos que contienen nuestras colecciones. Actualmente pueden abordarse muchos retos de especial importanciadifíciles o imposibles de superar hasta ahora para las personas más pobres del mundo. Por eso es importante que esos rasgos genéticos estén a disposición de todo el mundo de forma gratuita.

¿Por qué se esfuerzan ustedes tanto en fomentar la participación y formación de la población local?

Las entidades e instituciones que colaboran con nosotros son fundamentales para que tengamos éxito. Trabajar con instituciones de investigación y colaboración, tanto gubernamentales, como no gubernamentales, nos proporciona una vía para llegar a los usuarios finales que constituyen uno de nuestros principales objetivos: los granjeros. Nuestros socios locales pueden contactar con la población local de una manera que en la que nosotros no podemos hacerlo y, al trabajar con ellos, multiplican los beneficios de las soluciones que aporta nuestra investigación: es una situación en la que todos salimos ganando. Nuestros colaboradores resultan esenciales para que nuestra investigación tenga éxito y para asegurar que obtiene el mayor impacto posible.

También estamos absolutamente convencidos del poder de capacitar a las personas. Si somos capaces de proporcionar a nuestros colaboradores adiestramiento, experiencia y conocimientos destinados a fortalecer su capacidad científica y de aplicación de los conocimientos, nuestro impacto común será aún mayor, y crearemos así un círculo virtuoso.

¿Qué posición adoptan en el tema de las variedades modificadas genéticamente, tan controvertido en Europa? ¿Considera que en los países con problemas de hambruna no hay lugar para tal controversia?

El IRR cree que la modificación genética y el arroz GM tienen el potencial de proporcionar de manera segura a quienes cultivan y consumen el arroz unos beneficios únicos a los que no se puede acceder con otras técnicas.

Hacen falta muchas tecnologías y técnicas de cultivo del arroz para desarrollar y proporcionar soluciones a los retos de la seguridad alimentaria, la pobreza, el cambio climático y la disponibilidad de recursos a los que se enfrentan los productores y consumidores de arroz. El IRRI cree que una investigación y desarrollo responsables y éticos en el ámbito del arroz GM ofrece otra oportunidad que deberíamos explorar para hacer frente a esos desafíos.

Actualmente no se comercializan variedades de arroz modificadas genéticamente (GM) en el mundo, aunque se han aprobado varias para ello. Muchas organizaciones de todo el mundo, incluido el IRRI, están utilizando la modificación genética como instrumento de investigación y para desarrollar potenciales variedades de arroz GM.

¿Cómo pueden ayudar sus investigaciones a combatir las consecuencias del cambio climático?

Con gran probabilidad, tanto gran mayoría de los impactos del cambio climático, como su impacto general en el arroz serán negativos. Un estudio del Instituto Internacional para la Investigación de la Política Alimentaria (IFPRI) predice un descenso del 15% en las cosechas de arroz irrigado en los países en desarrollo y un aumento del 12% en los precios del arroz, como resultado del cambio climático, hasta 2050.

La postura del IRRI para ayudar a la producción de arroz ante el cambio climático consiste en desarrollar variedades de arroz que puedan afrontar mejor las condiciones en las que previsiblemente tendrán que crecer y mejorar la gestión de las cosechas para obtener sistemas de producción de arroz más resistentes. También estamos trabajando encontrar formas de reducir emisiones en los procesos de producción de arroz.

Pilar Gil Villar