El xenón es un gas noble, incoloro e inodoro, que está presente en nuestra atmósfera. Se sabía desde hace tiempo que su origen está fuera de nuestro planeta, pero se ignoraba como había llegado hasta nosotros. Pero, ahora, investigadores de la Agencia Espacial Europea han solucionado el enigma. O al menos una parte de él. Y la respuesta es que fueron los cometas los que trajeron el gas a nuestro planeta.

La pista fue descubierta entre los datos recopilados por la misión Rosetta en el cometa 67P/Churyumov-Gerasimenko. Los investigadores descubrieron que el gas xenón que estaba atrapada en el coemta tenía una composición isotópica similar al que está presente en nuestro planeta.

Se confirma así la hipótesis ya existente que postulaba que el xenón más antiguo de nuestro planeta (el que está atrapado en el manto de la Tierra), llegó a través de asteroides. Pero el de la atmósfera es muy posterior, y vino a nuestro planeta transportado por los cometas.

De cualquier forma, esta hipótesis solo explica el origen de una parte de ese gas atmosférico (aproximadamente del 22%, que sería la porción de origen comentario). De dónde procede el resto sigue siendo un misterio.

Fuente: ScienceAlert.

Vicente Fernández López