Un grupo de científicos de Harvard, liderados por George Church, ha logrado desactivar una familia de retrovirus en cerdos vivos, editando su genoma. Los resultados, publicados en Science, tienen importantes implicaciones para la medicina de trasplante en humanos. Debido a la escasez de órganos y tejidos humanos para trasplantes, una alternativa es utilizar órganos de animales, en particular los de cerdos, en seres humanos.
El problema es que el genoma del cerdo incluye retrovirus endógenos que pueden transmitirse a otras células al cultivarse conjuntamente. Aquí es dónde las técnicas de edición genética podrían ser útiles para eliminar los virus más problemáticos. Esto se había intentado previamente, pero solo se obtuvieron resultados en líneas de células pero no en animales vivos.
El equipo de Church se ha convertido en el primero en demostrar que los retrovirus del cerdo pueden infectar a las células humanas cuando se cultivan juntos. Para evitar esto, los científicos identificaron los retrovirus, 25 en total, y mediante la técnica CRISPR, los desactivaron y consiguieron desarrollar células viables. Cuando implantaron los embriones en cerdas, encontraron que las crías resultantes no mostraban signos de los retrovirus.
Juan Scaliter