A medida que las personas envejecemos, nuestras células madre intestinales comienzan a perder su capacidad de regeneración. El problema es que estas células son la fuente de todas las células intestinales nuevas, por lo que su disminución puede hacer que sea más difícil recuperarse de infecciones gastrointestinales u otras afecciones del intestino.

De acuerdo a un reciente estudio, publicado en Stem Cell, esta pérdida de función de las células madre relacionada con la edad, se puede revertir con un ayuno de 24 horas. Los autores, liderados por Ömer Yilmaz, descubrieron que el ayuno mejora drásticamente la capacidad de las células madre para regenerarse, tanto en ratones jóvenes como en adultos.

Al ayunar, las células de los roedores comenzaron a descomponer los ácidos grasos en lugar de la glucosa, un cambio que estimuló su capacidad regenerativa. El equipo de Yilmaz también descubrió que podían impulsar la regeneración con una molécula que activa el mismo cambio metabólico. Tal intervención podría ayudar potencialmente a personas mayores que se recuperan de infecciones gastrointestinales o pacientes con cáncer que se someten a quimioterapia.

«El ayuno – explica Yilmaz en un comunicado – tiene muchos efectos en el intestino, que incluyen aumentar la regeneración y los posibles usos en cualquier tipo de dolencia que afecte al intestino, como infecciones o tumores. Entender cómo el ayuno mejora la salud en general, incluido el papel de las células madre adultas en la regeneración intestinal, en la reparación y en el envejecimiento, es un interés fundamental de nuestro laboratorio”.
“Este estudio – concluye David Sabatini, coautor del estudio – proporcionó evidencia de que el ayuno induce un cambio metabólico en las células madre intestinales, desde la utilización de carbohidratos hasta la quema de grasa. Curiosamente, el cambio de estas células hacia la oxidación de ácidos grasos, mejoró su función de manera significativa. La orientación farmacológica de esta vía puede proporcionar una oportunidad terapéutica para mejorar la homeostasis de los tejidos en las patologías asociadas a la edad”.

Juan Scaliter