Aparte de otros nutrientes, el huevo contiene muchas proteínas y vitaminas. Según un reciente estudio, nuestro cuerpo asimila hasta el 91 por ciento de sus proteínas cuando está cocinado y solo el 51 por ciento si está crudo.
Esto sucede porque el calor rompe sus estructuras moleculares y hace que digerirlas sea más sencillo. Sin embargo, las vitaminas se pierden con el calor, como indica una investigación que señaló que hasta el 20 por ciento de la vitamina A del huevo se esfuma cuando se cocina. Los expertos insisten en que los nutrientes más valiosos y abundantes del huevo son las proteínas, y las técnicas que más las liberan son el cocido y el escalfado. Además, estos procesos evitan que se añada grasa al alimento.
Redacción QUO