El plumaje del pavo real es realmente espectacular por su colorido. Pero dicen que escuchar su llamada es algo bastante desagradable. Y parece que no es el único caso, porque un estudio realizado por un investigador de la Universidad de Oxfordd ha llegado a la conclusión de que, normalmente, las aves no pueden ser hermosas y cantar bien al mismo tiempo (aunque hay casos excepcionales, por supuesto).
El investigador estudió los ritos de apareamiento de más de 500 especies de aves, y descubrió que aquellas que tenían un plumaje más hermoso y colorido (y que lo usaban en sus ritos de apareamiento), no tenían la facultad decantar bien. En cambio, aquellas que no eran tan hermosas, entonaban cantos y llamadas más agradables de oír.
Los resultados del estudio ponen de manifiesto que la evolución ha hecho que las aves prioricen una u otra característica como herramienta para el cortejo. Pero, ¿porqué no pueden desarrollar ambas? La respuesta a esa pregunta no está clara.
Podría tener que ver con el hábitat, dado que a las aves que viven en entornos boscosos y cerrados, les resultaría más útil la facultad de cantar, que tener un hermoso plumaje que no pueden desplegar con facilidad. Aunque la hipótesis más probable, según el autor del estudio, sea que debido al coste evolutivo que supone desarrollar estas herramientas, provoque que la evolución solo priorice una de ellas.
Fuente. NewScientist.
Vicente Fernández López
