Considerada una de las islas más frías del mundo, Ellesmere (Canadá) es la tercera más grande de Canadá, y una de las más montañosas. Armoniza como pocos lugares el paraíso y el infierno del Ártico. Sus paisajes y su riqueza en vida salvaje hacen que todo en ella resulta un desafío. Y aun así, fue el destino elegido por una zorra polar (Vulpes lagopus) para su peculiar viaje de 76 días.

Los investigadores noruegos Eva Fuglei y Arnaud Tarroux han contado sus hazañas en la revista Polar Research. Desde que dejó su localidad natal, Spitsbergen, en Noruega, el 26 de marzo de 2018, hasta que llegó a la isla de Ellesmere, el 10 de junio, anduvo una media de 46,3 kilómetros diarios, aunque hubo picos de hasta 155 kilómetros a su paso por Groenlandia.

«Por lo que sabemos, este es el desplazamiento más rápido registrado para esta especie, 1.4 veces más rápido que la tasa máxima registrada durante el movimiento de larga distancia reportado anteriormente por un zorro ártico adulto en Alaska«, explican los autores. Ha recorrido más de 3.500 kilómetros, no nadando entre continentes, sino caminando sobre glaciares.

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POLAR RESEARCH

La isla noruega a veces se puede unir a Groenlandia y América del Norte a través de un mar de agua helada. La distancia acumulada total recorrida durante todo el período de monitoreo, desde el momento en que se fue lugar de nacimiento el 1 de marzo de 2018 hasta que se estableció en la isla de Ellesmere el 1 de julio de 2018, es de 4.415 km. Es uno de los eventos de dispersión más largos jamás registrados en un zorro polar, dice el estudio.

Bajo la amenaza del deshielo

El hielo marino del Ártico, esa capa de agua de mar congelada que cubre la mayor parte del Océano Ártico y los mares vecinos en invierno, son de suma importancia para los animales, ya que les permite sus desplazamientos y les empuja a visitar otros continentes, evitando el aislamiento de las poblaciones. Los autores se preguntan cuánto tiempo seguirá siendo así. Los parches de hielo sufren una seria amenaza a causa del aumento de la temperatura.

El rápido calentamiento del Ártico puede cambiar esas condiciones que han hecho posible el desafío de este zorro polar, según advierten los investigadores. “Si la isla de Svalbard se queda libre de hielo durante todo el año, llevará al aislamiento de la población de zorros polares«, anuncian. El declive del hielo en la isla noruega ya está afectando a muchas especies de mamíferos marinos. Y las temperaturas que avanzó el Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente, publicado en marzo de 2019, no indican que esto vaya a mejorar.

Marian Benito