Mientas que en 600 millones de año se han producido cinco extinciones, en menos de seis siglos se podría producir la sexta. ¿El motivo? La destructiva acción humana sobre los ecosistemas.

La revista Science ha sacado un reportaje especial titulado Fauna en desaparición en el que alerta sobre los peligros de la reducción masiva de especies. El artículo pone de relieve las consecuencias ecológicas, sociales y económicas que podría conllevar la ya denominada «sexta ola de extinción» o «defaunación»

Los datos presentados son contundentes: desde el año 1500, 322 especies de vertebrados terrestres se han extinguido y los que todavía sobreviven han sufrido una reducción media del 25% en su número. Peor suerte han corrido los invertebrados, con una disminución del 45% de su población.

Ciertas clases de organismos son más susceptibles que otras al impacto humano. Entre los vertebrados, son los anfibios los que más lo sufren con un 41% de sus componentes amenazados; en el polo opuesto, los pájaros son los que menos lo notan con un 17% de sus especies en peligro.

En los distintos artículos del número especial también se habla sobre los conflictos sociales derivados de la defaunación tales como la explotación laboral o el tráfico ilícito de animales o de productos derivados como las aletas de tiburón y el marfil.

Finalmente, se proponen posibles soluciones para remediar este problema y se citan ejemplos de éxito, como las medidas de «refaunación» adoptadas por Nueva Zelanda.

Redacción QUO