Aunque lo parezca, el gato que vais a ver a continuación no es el homónimo de Tom Cruise para ninguna clase de Misión Imposible gatuna ni tampoco la grabación del videoclip de El Chombo para la canción El gato volador. El minino, el cual dudamos que quisiera saber qué se siente a varios metros de altura sin ninguna protección, se encontraba cobijado en una de las alas de la aeronave sin que el piloto ni los pasajeros se percatasen de su presencia hasta después del despegue.
El gato polizón dio el susto de su vida al piloto y a los tripulantes, pero consiguió, con una sangre fría pasmosa, ir desplazándose hasta un lugar donde pudiera aferrarse bien hasta que la pesadilla terminase. Finalmente el piloto volvió a tierra y el minino puso de nuevo las patas sobre suelo firme. Toda una aventura. Máxime para los pasajeros, que no parecían tener una conversación divertida hasta que llegó el gato.
Gana mucho si lo ves con esta canción de fondo:
Fuente: independent.co.uk
Redacción QUO
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