En marzo de 2018, un bulldog francés perdió la vida en un vuelo de la compañía americana United Airlines por una mala práctica de uno de sus tripulantes de cabina. Al parecer, al ver que el trasportín en el que viajaba no cabía en la parte delantera del asiento de su dueña, uno de los azafatos le pidió a la pasajera que debía subirlo al compartimento superior (reservado comúnmente para equipajes). Algo que le chocó ya que había pagado especialmente para que su mascota pudiera estar con ella y no fuese tratado como un simple bulto o maleta. Pero el tripulante le insistió, que si no lo hacía debía abandonar el vuelo. Aceptó y minutos más tarde, el perro murió por insuficiencia respiratoria.

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Ante este hecho, la compañía decidió suspender por unos meses su plan PetSafe reservado a los pasajeros que quieren llevar consigo a sus mascotas. Su intención era valorar los errores cometidos e intentar poner más cuidado en el tipo de animales que se aceptan, tamaños, razas y la época del año en la que se produce el viaje para evitar que errores como el que sucedió en marzo no se volviera a repetir. Esto ha supuesto que sean más restrictivos y que se amplíe de 6 a 21 el número de razas de perros y gatos que no podrán viajar en un vuelo de United Airlines a partir del próximo 9 de julio.

Desde esta fecha, únicamente podrán ser transportados en estos vuelos perros y gatos, por lo que ningún otro animal de compañía podrá ser aceptado. En caso de que estos tengan la nariz chata y mandíbulas fuertes también tendrán prohibido el acceso, una característica común a razas como pit bull, bóxer, pequinés, shih-tzus, varios tipos de bulldog o mastín, además de gatos birmanos y persas (puedes consultar toda la lista en este enlace). Según un representante de la compañía, los problemas de respiración que suelen tener podrían verse agravados en pleno vuelo y es algo que quieren evitar a toda costa.

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Por otro lado, se tendrá en cuenta también las altas temperaturas de diferentes destinos durante el verano. Preocupados por el calor que puedan sufrir, vuelos que vayan hacia Las Vegas, Palm Springs, Tucson o Phoenix tendrán vetado el transporte de cualquier tipo de animal entre el 1 de mayo y el 30 de septiembre.

Esperemos que la revisión de esta política ofrezca mejores condiciones de vuelo a los animales y no les sigan tratando como meros objetos de carga.

Alberto Pascual García