Mientras competía en el Jeffrey’s Bay (Sudáfrica) este fin de semana, Mick Fanning, campeón del mundo de surf, fue atacado por un tiburón. Por fortuna, el surfista sobrevivió al ataque, el cual fue grabado en directo por las cámaras de la organización encargada de retransmitir el evento.

Según declaró Fanning, «estaba sentado tranquilamente y noté como algo tiraba de la cuerda que tenía atada en la pierna. Cuando me percaté de lo que ocurría, salté con el fin de poder darle esquinazo. Sólo pude ver una aleta, pero mientras esperaba que me mordiese, le golpee en la espada». Según declaró la liga mundial de surf, el deportista resultó ileso física y psíquicamente. Además anunciaron que la J-Bay Open, una de las pruebas del campeonato mundial, había sido anulada. Los aterrados organizadores, en el momento del ataque, se temieron lo peor: «creíamos que iba a morir ante nosotros, ha sido un hecho realmente dramático».

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Sudáfrica registra una de las mayores concentraciones de tiburones de todo el planeta. Hace un par de años, un nadador sufrió el ataque de un tiburón blanco en Albatross Point, ubicado cerca de Jeffrey`’s Bay. Por desgracia, no vivió para contarlo.

¿Están aumentando los ataques de tiburones en el mundo?

En realidad no. Un informe realizado por investigadores de la Universidad de Stanford explica que sí han aumentado los informes de ataques, pero que esto se debe a que más personas nadan en el mar, y que el riesgo individual de que un tiburón te muerda en realidad se ha desplomado. Por ejemplo, la población costera de California se ha triplicado desde la década de los 50 de siete a 21 millones de habitantes.

Para llegar a estas conclusiones, los investigadores de Stanford compararon el registro de mordeduras de tiburón con los datos de actividad humana en el océano californiano. En el año 2013, la probabilidad de que un nadador fuese atacado por un tiburón era de 1 en 728 millones. El grupo de mayor riesgo son efectivamente los surfistas, con 1 posibilidad en 17 millones. Los buzos son el segundo grupo que más debe temer, pues la probabilidad es de 1 en 136 millones. No obstante, los científicos aseguran que las posibilidades de ser atacados por un escualo (en aguas californianas) cayeron un 91% entre 1950 y 2013.

Según explicaba Francesco Ferretti, científico de la Estación Marina Hopkins de Stanford y codirector de la investigación publicada en la revista Frontiers in Ecology and the Environment, «hemos registrado un reciente incremento de ataques de tiburón en algunas zonas, como Carolina del Norte y Australia Occidental, pero también hay que tener en cuenta el número de personas que van al mar y la intensidad del uso oceánico«.

¿Hay más tiburones?

Tampoco hay muchos más tiburones en el mar. Si bien están recibiendo más protección que anteriormente, «el repunte es mínimo en comparación con el incremento de bañistas» reconoce Ferreti.

El científico recomienda que los bañistas tengan un uso más responsable del mar, como evitar bañarse con objetos plateados, heridas abiertas, evitar aguas oscuras o turbulentas, permanecer cerca de la playa, estar atentos a las temporadas o mantenerse alejados de colonias de focas. Se ha demostrado que cuando hay más ataques en California es entre octubre y noviembre, dado que los tiburones van hacia las costas en busca de presas que llevarse a sus fauces.

Fuentes:

iflscience.com | news.stanford.edu |

Redacción QUO