El tiburón de Groenlandia (Somniosus microcefalia) se distribuye ampliamente a través del Atlántico Norte. Los adultos de esta especie pueden llegar a medir hasta 5 metros y aunque su biología no es muy conocida, sí se sabe que su tasas de crecimiento es muy lenta, aproximadamente 1 centímetro por año, lo que indica la excepcional longevidad de estos escualos.

Los métodos tradicionales para determinar la edad de una especie implican el análisis de tejido calcificado, pero no hay suficientes datos al respecto en cuanto a los tiburones de Groenlandia. Por ello, para determinar el promedio de edad de esta especie, Julius Nielsen, biólogo de la Universidad de Copenhague, ha recurrido a la datación por radiocarbono aplicada al cristalino de 28 hembras capturadas de forma fortuita. Su análisis sugiere una vida media de al menos 272 años. Los dos ejemplares más grandes en este estudio, de 493 cm y 502 cm de longitud, con una edad estimada de aproximadamente 335 y 392 años, respectivamente.

Lo que es más, ya que los informes anteriores sugieren que las hembras de esta especie alcanzan la madurez sexual a partir de los cuatro metros de longitud, la edad correspondiente sería de al menos 156 años de edad, según los autores. Sobre la base de estos resultados, publicados en la revista Science, el tiburón de Groenlandia es, por ahora, el vertebrado más longevo que recorre el planeta.

Juan Scaliter