Un joven de 21 años sufre quemaduras graves tras caer en una de las fuentes termales del parque

Gervais Dylan Gatete, un joven de 21 años, ha sufrido quemaduras graves traer caer en la aguas termales del parque nacional de Yellowstone.

Según sabemos, el joven fue trasladado al Hospital de Utah (Salt Lake City) donde permanece estable, aunque en condición crítica.

Actualmente se están investigando las causas del accidente.

Fuente: livescience.com

Encuentran misteriosos microbios en las aguas termales ácidas del parque

Nadie los había visto hasta ahora. Su tamaño convierte su observación en todo un mérito, ya que tan solo miden la cien mil millonésima parte de un metro. 

Los Archaeon Nanopusillus acidilobi, solo habitan en las aguas térmales ácidas del parque. Ahora, el trabajo de los investigadores consiste en estudiar cómo interactúan con el otro anfitrión de estos manantiales: el Acidilobus.

Fuente: dailymail.co.uk

El hombre que desapareció en un géiser

Tras el terrible asesinato de Scarface y lo mal que terminó un bisonte a consecuencia de unos turistas que solo querían ayudar, la tragedia ha vuelto a ser protagonista en el célebre parque de Yellowstone. En este caso la víctima es un joven de 20 años que, según testigos presenciales, caminó el pasado martes por la tarde dirección al géiser Norris y nunca más se supo de él.

Según explicó Jody Lyle, portavoz del parque, a CNN: «los guardaparques están tratando este incidente como una fatalidad más que probable, ya que la víctima aún no ha sido localizada». Los indicios apuntan a que el joven pudo caer en el interior del géiser, que precisamente en una de las zonas termales más calientes de Yellowstone.

Otro incidente tuvo lugar este pasado fin de semana según informa la Gaceta Billings. En este caso fue un niño de 13 años el que metió el pie en uno de los lagos termales y se quemó el tobillo. Por desgracia, su padre resbaló cuando trataba de ayudarle.

El bebé bisonte que no pudo regresar con los suyos

Dice un refrán español que «de buenas intenciones está empedrado el camino del infierno». Imagina la situación. Eres un turista que está visitando el parque de Yellowstone y de repente te encuentras un bebé bisonte deambulando solitario ¿qué haces? ¿intuyes que si está en el parque no debes tocarlo o lo metes en tu furgoneta? La segunda opción fue la que escogieron este par de turistas. Pensando que el animal estaba asustado, helado de frío y en peligro, llegaron a la conclusión de que debía ser rescatado en ese momento y, sin pensarlo dos veces, le subieron a su vehículo.

Una vez le aportaron los cuidados que creyeron necesarios para su óptima recuperación, los visitantes regresaron al lugar donde le habían recogido para devolver al bebé bisonte con su manada. Por desgracia, aquí fue donde comenzó el drama y el principio del fin para el pequeño bisonte. Cuando intentó integrarse nuevamente en su familia, el clan le rechazó frontalmente. Eso obligó a los responsables del Servicio Nacional de Parques de Estados Unidos a tomar una decisión drástica y no exenta de polémica: sacrificarle. Y así fue como en menos de dos semanas la sangre volvió a correr en Yellowstone.

 

Esta dramática situación ha obligado a la agencia federal a recordar que no solo es peligroso, sino que está completamente prohibido acercarse o alimentar a los animales del parque. Por su parte, los conservadores trataban de acallar las críticas a su decisión recordando en un comunicado que ”la interferencia con personas puede causar que las madres rechacen después a su prole. Dado que este fue el caso, los funcionarios del parque trataron de reunir a la cría con su manada de todas las maneras posibles. Fracasaron. Por ello, la cría fue finalmente sacrificada, ya que fue abandonada y se vio obligada a deambular por el parque causando graves situaciones de riesgo, ya que se acercaba a los visitantes y cruzaba continuamente la carretera». 

Así que ya sabes, ante la duda: por favor, ¡no hagas nada por la vida salvaje!

Asesinan a Scarface, el oso más famoso de Yellowstone

Un desalmado decidió acabar con el oso pardo más estudiado de Yellowstone: el N. 211, conocido popularmente como Scarface a raíz de una ‘cicatriz’ en su hocico a consecuencia de una pelea con otro oso. La terrible noticia fue confirmada por el Montana Fish, Wildlife and Parks Department ante la incredulidad de varios grupos de defensores de animales. La muerte de Scarface no fue un accidente ni una muerte natural, fue asesinado a sangre fría. Las autoridades de Montana aseguran que están tratando de descubrir al culpable, aunque por otro lado no explican las razones de dar a conocer la noticia ahora cuando el crimen ocurrió el pasado mes de noviembre.

Las leyes federales advierten que matar a un oso es delito exceptuando si se ha cometido actuando en defensa propia. Al menos por ahora, ya que algunos sectores plantean la opción de despenalizar la caza de osos en el área de Yellowstone, una decisión que abriría la práctica de la cacería en Wyoming, Idaho y Montana. La especie de Scarface fue declarada en peligro de extinción cuando su población se redujo a menos de 150 ejemplares en la década de los 70. A día de hoy se ha conseguido elevar las cifras fuera del nivel de peligro, aunque una decisión de este tipo podría echar todo el trabajo por la borda. 

Scarface fue capturado en 17 ocasiones por los Ranger para ser estudiado. La primera vez, en 1993, era solo un cachorro con dos años y 70 kilos de peso. Después, casi alcanzó las tres toneladas. Lo que no cabe duda es que se convirtió en la estrella del parque. Una pena haberle perdido de una forma tan violenta.

En esta fotogalería hacemos un recorrido por la historia de otros osos famosos.

El supuesto ataque de los osos de Yellowstone

Hace unos días, vimos un vídeo viral en el que se acusaba a una familia de osos negros el haber perseguido a un grupo de turistas dándoles un susto que podía haber acabado en una tragedia. Pero ¿qué ocurrió realmente en ese vídeo?

Lejos de lo que cualquiera podía imaginar viendo las imágenes, los animales no tuvieron la culpa de la situación. La historia comenzó con lo que el parque denomina un bear jam, que viene a ser una parada en masa de los coches de los visitantes con el fin de que puedan contemplar a los osos haciendo sus quehaceres diarios. En este caso, una familia de osos disfrutando de un bonito día cerca de un puente.

Esa familia de osos estaba formada por una madre protegiendo a sus pequeños cachorros de un año. Intentaron atravesar el puente invadido por humanos curiosos. Su intención sólo era alejarse de ellos lo más rápidamente posible, «pero la gente se asustó y les bloquearon el paso» asegura Kerry Gunther, trabajador del parque Yellowstone. Y añade: «todo lo sucedido en el vídeo fue provocado por el comportamiento humano».

La sociedad, que rápidamente culpó a los osos de todo lo acaecido, no esperó a saber la versión de los pobres osos. Finalmente fueron los turistas los que acorralaron a esta familia de úrsidos, que entraron en pánico y buscaron una vía de huida a través suyo.