Una de las mejores noticias para los chocoadictos fue cuando la Universidad de Cambridge descubrió que un elevado consumo de chocolate reduce de forma significativa el riesgo cardiovascular, la diabetes y el derrame cerebral. Ahora, los golosos tienen un nuevo motivo de regocijo. Un grupo de científicos de la Universidad de Granada, encabezados por Magdalena Cuenca-García, relaciona su ingesta con un bajo nivel de depósitos grasos, al menos en adolescentes.
Los investigadores realizaron un estudio entre 1.458 europeos, con una edad comprendida entre los 12 y los 17 años y constataron que no solo un alto consumo de chocolate no aumentaba los depósitos grasos, sino que estaba directamente relacionado con un bajo nivel de obesidad, independientemente de la actividad física y la dieta.
Mediante impedancia bioeléctrica, se midió la circunferencia de la cintura, el índice de masa corporal y el porcentaje de grasa de los participantes. En los que habían ingerido altas dosis de chocolate se encontraron bajo niveles de grasa, independientemente de su edad, sexo, consumo energético, actividad física y consumo de grasas saturadas, frutas, vegetales, té y café.
Los investigadores sospechan que estos resultados pueden ser consecuencia de las catequinas, un tipo de flavonoide que se encuentra en el chocolate y que incide en la producción de cortisol e insulina. Pero, ojo, también advierten que un consumo excesivo puede ser perjudicial.
Redacción QUO
Consumir cannabis puede provocar cambios en el epigenoma del cuerpo humano, según sugiere un estudio…
Las pruebas sugieren que los grandes felinos extintos con dientes de sable conservaban a sus…
La falta de datos de la industria química en la UE impide a menudo evaluar…
El cambio climático podría convertirse en el principal causante del declive de la biodiversidad a…
La vitamina D altera las bacterias intestinales de los ratones y como resultado mejora su…
Los científicos confirman la composición del núcleo interno de la luna, que consiste en una…