Bilingües y resolutivos
Una investigación de la Universidad escocesa de Strathclyde reveló que los niños bilingües en gaélico e inglés eran más hábiles para resolver problemas, gracias a que estaban más acostumbrados que los monolingües a saltar de una lógica a otra.
La lógica y las sensaciones
Parece razonable que entender un idioma extranjero implica un uso intensivo de las zonas del cerebro que procesan la lógica. Pero no solo: la parte encargada de las sensaciones se activa del mismo modo para obtener el significado.
La academia del rock
Un experimento en California detectó que los alumnos retenían mejor los conceptos si los cantaban. Otro estudio en Houston demostró que los bilingües desarrollan mejor oído. Y eso les facilita aprender un tercer idioma.
Gramática, y no acento
Dárselas de fino pronunciando muy bien no es tan útil para hacerse entender como hablar “macarrónico”, pero con buena gramática. Lo probó una universidad canadiense con 40 hablantes y 60 principiantes que les escuchaban.
Redacción QUO