La escultura submarina más grande del mundo se llama Ocean Atlas y, como indica su nombre, se inspira en el titán que (según la mitología griega) sostenía el mundo sobre sus hombros. Su autor es el artista francés Jason deCaires, quien, además de instalar su obra en el fondo submarino, a pocos metros de la costa de Bahamas, creó una barrera de coral artificial para completar el conjunto. La escultura fue fabricada con el mismo tipo de cemento que usaban los romanos para construir sus puentes, que tiene un pH neutro, lo que hace que no se oxide y pueda durar cientos de años debajo del agua.
EL DATO: 70 toneladas de peso y cinco metros de altura son sus medidas.
Redacción QUO