Nikita Jruschov cerró el oscuro capítulo de los desmanes de Stalin al frente de la URSS. Fue también la gran bestia roja de la Guerra Fría. Pero no será recordado por esas dos facetas de su carrera, sino más bien por sus modales de cosaco. En 1960, el jefe de la Delegación filipina ante las Naciones Unidas acusó a los soviéticos de imperialistas, a lo que Jruschov respondió golpeando fuertemente con su zapato en el estrado.Y un rato después, con los puños.
Redacción QUO
Consumir cannabis puede provocar cambios en el epigenoma del cuerpo humano, según sugiere un estudio…
Las pruebas sugieren que los grandes felinos extintos con dientes de sable conservaban a sus…
La falta de datos de la industria química en la UE impide a menudo evaluar…
El cambio climático podría convertirse en el principal causante del declive de la biodiversidad a…
La vitamina D altera las bacterias intestinales de los ratones y como resultado mejora su…
Los científicos confirman la composición del núcleo interno de la luna, que consiste en una…