Marco Evaristti, un artista chileno afincado en Copenhague, ha sido detenido por cargos de vandalismo tras pintar de rosa el géiser islandés Strokkur. Para realizar su delictiva obra utilizó colorante alimenticio, el mismo con el que damos en casa color a nuestros pasteles.
Según informaba la BBC, el artista no pidió los permisos pertinentes a las autoridades porque, según declaró «la naturaleza no es de nadie. Me encanta la naturaleza y por eso la decoro». Se describe a sí mismo como un ‘pintor de paisajes’. Según recoge BBC, estas declaraciones han levantado ampollas en Islandia y en las redes sociales que acusan al chileno de arrogante e irrespetuoso con el medio ambiente.
No es la primera vez que el artista levanta la polémica. También pintó de rosa un iceberg en Groenlandia, una duna del Desierto del Sahara, cubrió de rojo parte de la cima del Mont-Blanc y, en 2001, presentó un modelo de licuadoras con peces en su interior.
Fuente | BBC
Redacción QUO
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