Los biohackers son aficionados a la biología que utilizan redes sociales específicas para darse claves sobre cómo extraer ADN o buscar huellas genéticas desde su cocina.
McKenzie Cowell, creador de la red de biohackers más puntera (DYIbio.org), defiende que quizá estos aficionados hagan aportaciones a la ciencia como las que los hackers informáticos han hecho, sin duda, a la tecnología.
Y es que las redes sociales son una herramienta muy útil para quienes deseen compartir y debatir sobre temas científicos. De hecho, en Facebook hay miles de grupos cuyo tema de interés es científico.
Desde estudiantes de genética que intercambian opiniones sobre células madre hasta amantes de la astronomía y forofos de la NASA que debaten sobre Marte.
En cuanto a las redes sociales científicas, la más popular es Nature Network, seguida de Biomed Network. Entre las últimas en llegar, ReseachGate está causando furor.
Es una especie de LinkedIn de científicos que, además, permite buscar investigaciones en todo el mundo.
Redacción QUO