Hace unas semanas os contábamos que varios diplomáticos norteamericanos aseguraban que estaban siendo atacados en Cuba por una supuesta arma sónica. Los expedientes médicos confirmaban la teoría de los funcionarios, por lo que Estados Unidos tomó medidas al respecto de forma inminente: sacar al personal menos imprescindible de la embajada del país y expulsar de forma fulminante a 15 diplomáticos cubanos de la embajada de Washington como represalia.
Pero los supuestos ataques acústicos, de los que no se sabe absolutamente nada por ahora, no han cesado con los movimientos diplomáticos entre ambos países. Según recoge la CBS, ahora son los ciudadanos y los turistas los que se quejan de las mismas dolencias.
El Departamento de Estado norteamericano declaró al respecto que no tenía forma de comprobar si personas ajenas a la diplomacia habían sido víctimas de los mismos ataques que los funcionarios. Aunque no informó de cuántos casos se habían recogido, sí ha publicado el nombre de dos hoteles de La Habana en los cuales se han registrado ataques: el Nacional y el Capri. Tras conocer los hechos, el gobierno estableció ciertas restricciones a dichos hoteles.
Por ahora, se sigue sin tener más información sobre estos supuestos ataques sónicos. El gobierno cubano afirma no tener absolutamente nada que ver en el asunto y asegura que desconoce al autor o autores materiales. De hecho, está facilitando la labor del FBI y del gobierno norteamericano durante la investigación.
Rafael Mingorance