La Marina tailandesa no puede estar más contenta: “Dos días y 8 jabalíes, ¡hurra!” escribía hace apenas unas horas en su página de Facebook (el equipo de fútbol del que forman parte se hacen llamar “los jabalíes”). Y no es para menos, en apenas 48 horas han logrado poner a salvo a 8 de las 12 jóvenes que se encontraban atrapados en la cueva. Nadie sabe la identidad de quienes han sido rescatados, ni siquiera los padres lo saben. Han decidido esperar a que todos estén fuera junto con su entrenador para poder celebrar una “victoria” común. Incluso cuando puedan ir a verles, tendrán que hacerlo a través de un cristal para evitar cualquier tipo de infección que pueda poner en riesgo su salud.
Por segundo día consecutivo, 18 submarinistas (5 locales y 13 extranjeros, entre los que hay un español) se han dirigido hasta la zona donde se encontraban los menores y han ido sacándoles uno a uno junto con dos buceadores cada uno. La suerte ha querido que los niveles de agua hayan sido los más óptimos posibles para la evacuación ordenada de los otros 4 jóvenes elegidos para esta ocasión. De hecho, según han informado tras la salida, solo han tenido que bucear en apenas una quinta parte del recorrido. Cualquier mínimo detalle se ha tenido en cuenta para que la segunda jornada volviera a ser igual de exitosa. Y así ha sido.
Ahora los jóvenes se enfrentan a la vuelta a la realidad. Están siendo sometidos a diferentes pruebas médicas tras haber permanecido más de dos semanas rodeados de tanta humedad y permanecerán en observación psicológica durante un tiempo. La salud mental de los menores es lo que más les preocupa ahora a todos y esperan que la incorporación a las clases vuelva a ser óptimas, con todo el apoyo necesario, pero sin llegar a darles un trato distinto a los demás. Desde el propio colegio, apuntan a los medios, que lo más importante es que se integren cuanto antes en su vida diaria de la mejor manera posible.
Mientras tanto, Elon Musk, sigue inventando
El cofundador de Tesla y director general de Tesla ha sido otro de los protagonistas del día al lanzar por Twitter su idea para salvar a los jóvenes restantes en caso de que las cosas se pusieran feas. Una forma de dar esperanza a quienes aún miran al cielo por miedo a que las lluvias pudieran inundar la cueva otra vez. Pero el trabajo a contrarreloj que llevan los equipos de rescate, no hacen pensar que sea necesario. Aún así, esta es la forma en la pensaban ayudarles.
Como veis, se trata de una especie de cápsula en forma de bala en la que perfectamente cabe un joven de suedad (de 11 a 16 años). La idea es que la persona que va dentro se encuentra encerrada de forma hermética sin llegar a mojarse. A los lados, existen dos bombonas de oxígeno, el necesario para completar la travesía en las zonas que fuera necesario pasar por agua. Quizá no llegue a usarse, pero es un ejemplo de cómo la creatividad puede llegar a ser tan impresionante en momentos de necesidad.
Alberto Pascual García
