Iker Casillas la ha liado. El portero publicó en twitter que estaba manteniendo una tertulia con varios amigos sobre la llegada del hombre a la Luna, y escribió lo siguiente: «El año que viene se cumplen 50 años (supuestamente) desde que el hombre pisó la Luna. Estoy en una cena con amigos… discutiendo sobre ello. ¡Elevo la tertulia a público! ¿Creéis que se pisó? ¡Yo no!» Y acto seguido invitó a sus seguidores a que votasen al respecto.

Ignoramos si hablaba en serio o estaba bromeando, pero esta publicación le ha valido al admirado deportista un aluvión de comentarios críticos, entre ellos el del mismísimo ministro Pedro Duque, quien afirmó que: «Los hechos no cambian, opine lo que la gente opine». Pero Casillas no es la única celebridad que cree que el ser humano jamás pisó la superficcie de nuestro planeta. Sin ir más lejos, Whoopi Goldberg también piensa que el alunizaje del Apolo 11 fue un montaje. Y esgrime como prueba de ello el hecho de que la bandera de Estados Unidos ondee sin que haya viento.

Y, como ella, son muchísimos los personajes famosos que creen en las más diversas teorías conspiranoicas. Bruce Willis, por ejemplo, siempre ha manifestado sus dudas sobre que Lee Oarvey Oswald asesinara al presidente John Fitzgerald Kennedy. Y aseguró en una entrevista que estaba convencido de que los auténticos responsables del magnicidio controlaban la política de Estados Unidos.

Otro admirado actor, Robert de Niro, cree en la tesis de que las vacunas pueden provocar autismo, y ha ofrecido 100.000 dólares a quien le demuestre que son seguras. Lo que nos extraña es que nadie se los haya reclamado hasta la fecha. Eso sí, el protagonista de Taxi driver no se reconoce como antivacunas. Especifica que él quiere vacunas, pero seguras.

Aunque quien se lleva la plama en cuanto a teorías delirantes es el rockero Dave Mustaine, ex guitarrista de Metállica y fundador de Megadeth, quien insinuó que la adminsitración Obama estaba detrás de los tiroteos de masas que se producían en Estados Unidos, ya que buscaban excusas para poder controlar el derecho a portar armas de fuego.

Vicente Fernández López