Loreak es la nueva película española candidata al oscar de Hollywood. Vamos a repasar la lista de los filmes nacionales que fueorn nominados a la preciada estatuilla pero que al final no ganaron.

Asignatura aprobada (1987)

Tercer intento de Jose Luis Garci, abordando la crisis de los 50 con su particular estilo, entre nostálgico y ternurista. He de cofnesar que yo a esta peli siempre le he visto un puntito. ¿Será porque sale Gijón?

Sea como sea, al final ganó (y con toda justicia) la maravillosa El festín de Babette, del sueco Gabriel Axel.

El amor brujo (1967)

Rovira Beleta compitió por segunda vez con esta adaptación de la obra de Manuel de Falla protagonizada por dos grandes bailaores, Antonio Gades y La Polaca.

El premio al final se lo llevó esa deliciosa obra maestra checoslovaca que es Trenes rigurosamente vigilados, de Jiri Menzel.

Secretos del corazón (1997)

Delicado y sutil retrato de las interioridades de la vida familiar, vistas a través de la mirada de un niño. Puede ser la mejor película de su director Montxo Armendáriz.

El galardó se lo arrebató la holandesa Character.

Ese oscuro objeto del deseo (1977)

Buñuel compitió por tercera vez con la que fue su última película. Se trata de un relato negro e irónico sobre el deseo y la obsesión sexual, basado en la obra La mujer y el pelele. Destaca el hecho de que dos actrices diferentes (Carole Bouquet y Angela Molina) interpreten al mismo personaje.

Al final ganó la francesa (y hoy olvidadísima) Madame Rosa, dirigida por Moshé Mizrahi.

Mujeres al borde de un ataque de nervios (1987)

Pedro Almodóvar puso por primera vez el pie en Hollywood con esta exitosa y alocada comedia, convertida en título de culto del cine español de los 80.

Era la clara favorita para ganar pero, al final, se impuso la sueca (y magnífica) Pelle el conquistador, de Billie August.

Los Tarantos (1963)

Romeo y Julieta en versión flamenca, magistralmente dirigida por Rovira Beleta. El filme destaca por su banda sonora y por su retrato realista y descarnado de los ambientes suburbiales de la Barcelona de la época. En su reparto figrguan además grandes como Carmen Amaya, Antonio Gades y Peret.

Pero, claro, enfrente estaba un acorazado de la talla del Ocho y medio de Federico fellini, que al final se llevó el Oscar.

Carmen (1983)

Carlos Saura compitió con esta película, segunda parte de su trilogía flamenca. Se trata de un espectáculo casi bretchiano, desprovisto de todo artificio y desarrollado en escenario casi desnudos.

Pero, claro, entre los rivales estaba el gran Bergman con ese monumento cinematográfico que es Fanny y Alexander, y se llevó el premio.

La venganza (1958)

Fue la primera película española nominada al Oscar. Un drama rural dirigido por Juan Antonio Bardem y protagonizado por Carmen Sevilla, Jorge Mistral y Vaff Vallone.

El filme proponía una metáfora sobre la guerra civil y la necesidad de cerrar las heridas y reconciliar ambos bandos.

Al final el premio lo ganó Francia con la mítica Orfeo negro.

 

Mi querida señorita (1972)

inolvidable película de Jaime de Armiñán sobre la historia de una mujer que, pasada la cuarentena, descubre que en realidad es un hombre.

Un filme triste y melancólico que ofrece un negro retrato de la España de la época y que destaca por la asombrosa interpretación de José Luis López Vázquez.

El premio al final se lo llevó Luis Biuñuel, que ese año (vaya por Dios) competía con una película producida en Francia, El discreto encanto de la burguesía.

 

Plácido (1961)

Probablemente la obra maestra de Berlanga, y una de las mejores películas de la historia de nuestro cine. Negrísima comedia coral ambientada en Nochebuena, en una ciudad de provincias. Mientras su habitantes se suman a la campaña «siente a un pobre a su mesa», el protagonista se las ve y las desea para tratar de pagar la letra de su motocarro.

Pero Berlanga fue derrotado por el sueco Ingmar Bergman y película Como en un espejo.

El nido (1980)

Segunda película de Jaime de Armiñán que compitió por la estatuilla. Es la melancólica historia del imposible (y platónico) romance entre un hombre maduro amante de la ornitología (Héctor Alterio) y una adolescente (Ana Torrent), y las reacciones que provoca.

El premio al final se lo llevó Rusia, con la encantadora Moscú no cree en las lágrimas.

El abuelo (1998)

Buñuel no ganó el Oscar adaptando a Galdós, y Garci tampoco. Quizás se debió a que esta película era demasiado académica, excesivamente televisiva en su look.

O a la vez a que una de sus competidoras era la Vida es bella, de Roberto Benigni que, además de hacer llorar a medio mundo, se llevó el premio.

Tristana (1970)

Luis Buñuel compitió por primera vez con esta magistral (y bastante libre) adaptación de la novela de Pérez Galdós, protagonizada por Catherine Deneuve, Fernando Rey y Franco Nero.

El premio al final fue para la italiana Investigación de un ciudadano libre de toda sospecha, de Elio Petri. Un filme estimable pero inferior al de Buñuel.

Sesión contínua (1984)

José Luis Garci, que dos años antes había ganado el primer Oscar para una película española con Volver a empezar, compitió por segunda vez con esta cinta sobre la relación entre dos veteranos guionistas, interpretados por Adolfo Marsillach y Jesús Puente.

El galardón se lo llevó Suiza con movimiento peligroso.

Mamá cumple cien años (1979)

La «primera vez» de Saura fue con esta celebradísima comedia negra alegórica, recordada principalmente por el gran papel de la inolvidable Rafaela Aparicio.

¿El premio? Fue para la mítica El tambor de hojalata, de Volker Schlöndorff, que no necesita presentaciones.