James Popsys es un maestro en el arte de la manipulación fotográfica. Y una buena muestra son estas imágenes que, gracias al añadido (o la supresión) de un elemento, consiguen que la realidad adquiera un matiz tan surrealista como divertido.
Gigantescos calcetines que deben de pertenecer a alguien del tamaño de Goliat, cuelgan inocentemente de la facha de un edificio.
Igualmente, solo un gigante podría manjerar los dardos clavados en esta diana.
La naturaleza reconvertida en soporte de la tecnología.
Una hilera de patitos de goma en la bahía de Seatlle.
Sólo con la imaginación es posible deslizarse como éste ciclista, sin ruedas ni motor.