Durante la noche de Halloween se produjo un espectáculo inesperado en la ciudad japonesa de Niigara. Los habitantes de dicha localidad pudieron ver cómo una impresionante bola de color verde surcaba el cielo para, al cabo de unos quince segundos, desaparecer.
Aunque era muchos los que aseguraban que se trataba de un ovni, los astrónomos ya han aclarado que, en realidad, era un meteorito especialmente luminoso.
Consumir cannabis puede provocar cambios en el epigenoma del cuerpo humano, según sugiere un estudio…
Las pruebas sugieren que los grandes felinos extintos con dientes de sable conservaban a sus…
La falta de datos de la industria química en la UE impide a menudo evaluar…
El cambio climático podría convertirse en el principal causante del declive de la biodiversidad a…
La vitamina D altera las bacterias intestinales de los ratones y como resultado mejora su…
Los científicos confirman la composición del núcleo interno de la luna, que consiste en una…