Todos sabemos que cuando una herida pica no debemos rascarnos, porque se levantaría la costra y volveríamos a sangrar de nuevo. Lo que no está tan claro es la razón por la que pican las heridas, de hecho, ni siquiera los médicos se ponen de acuerdo.

Lo que está claro es que tiene que ver con el proceso de cicatrización y regeneración de la piel. Algunos científicos lo achacan a una sustancia llamada histamina que se libera en respuesta a una posible amenaza y que está presente en las costras de las heridas. Otros creen que es culpa de los nervios que se rompen cuando sufrimos algún daño en la piel. Además, durante la cicatrización los nervios son más sensibles y el cerebro puede malinterpretar los estímulos que provienen de ellos.

También hay una última teoría: los que creen que la capa de piel que sustituye a la magullada tira de los extremos de la costra provocando el picor. Por último, puede ser que se deba simplemente a la sequedad de la piel. ¿A qué no te imaginabas que era tan complicado?.

Publicada en la sección #Quonectados Nº 206 de @QuoRevista

Redacción QUO