El objetivo es reducir la presencia de la bacteria Listeria monocytogenes en carnes, principalmente de pollo, salchichas y embutidos. Este es uno de los microorganismos más difíciles de controlar en productos refrigerados. El aerosol se aplica sobre la superficie del alimento antes del envasado, para evitar el crecimiento de microorganismos. También se está valorando impregnar con fagos las superficies en las que se manipulan alimentos. Un aditivo más; en este caso, saludable.

Redacción QUO