La guerra de Vietnam finalizó en 1975 pero, ahora, 42 años después, sus veteranos siguen manifestando secuelas inesperadas de aquel terrible conflicto. Un estudio realizado por el Centers for Disease Control and Prevention ha revelado que se están produciendo varios centenares de casos de cáncer en las vías biliares, un tipo de tumor muy poco frecuente provocado, entre otras causas, por un parásito conocido como duela del hígado.

Los investigadores están convencidos de que la mayoría de estos veteranos se contagiaron durante el conflicto en el sudeste asiático, al comer carne cruda o poco hecha. Lo llamativo es que, en casi todos los casos, las personas infectadas no han manifestado síntomas de ningún tipo, salvo algún dolor o fiebre ocasional, lo que imposibilitó que pudieran ser diagnosticados hasta la aparición del cáncer.

La duela del hígado, también llamada fasciola hepática, fue descrita por primera vez en 1373, cuando fue descubierta en el organismo de un ejemplar de ovino. Este parásito es originario de Asia, pero llegó a occidente a través de viajeros. Su incidencia en Europa empezó a ser más habitual a raíz del colonialismo. Su apariencia es la de un gusano carnoso de color blanquecino que mide dos centímetros de media.

Una vez que penetra en el organismo humano, el parásito puede provocar una inflación de las vías biliares que destruye el tejido vivo y acaba provocando la aparición de un tipo de tumor llamado colangiocarcinoma. La incidencia de este tipo de cáncer en Occidente es de unos siete casos por cada millón de personas. Y, entre otros síntomas, provoca que la orina se vuelva negra y la piel adquiera un color amarillento.

Vicente Fernández López