Los investigadores del cerebro suelen obtener imágenes insólitas de su anatomía y de su funcionamiento; tanto que, en ocasiones, parecen salidas de las manos de un artista. En realidad van de la mano. Además de en los médicos, la mente humana ha despertado un interés secular entre filósofos y artistas, que la han representado de mil formas. Buena parte de ellas se han recopilado ahora en la exposición Imágenes de la mente en el arte y la ciencia que se expone en Berlín.
Las médicas y las artísticas comparten la metodología que ya usaba Ramón y Cajal: mirar y dibujar, mirar y fotografiar, mirar e interpretar. Medicina y arte proporcionan una visión de la complejidad del cerebro. La muestra recoge las obras más antiguas en las que aparece representada, los manuscritos medievales, los dibujos de Leonardo da Vinci y Ramón y Cajal, los retratos de Rembrandt y las fotografías de Sigmund Freud. ¿Cómo es posible que haya inspirado a personajes tan distintos? Es el misterio de la mente.
Autorretrato de Edmund Kalb. Pintó más de 600, indistinguibles a primera vista, que son un reflejo de su personalidad.
¿A que podía haberlas dibujado perfectamente Ramón y Cajal? No son una copia. Las imágenes médicas y las artísticas de la exposición Imágenes de la mente en el arte y la ciencia se inspiran en el mismo método del científico aragonés: mirar y dibujar, mirar e interpretar.
Cabeza del inventor Poyet, de autor desconocido.
Serigrafía de Pablo García López, de su colección Mariposas del alma.
Charles Bell explicó en una serie de grabados la anatomía del cerebro y las funciones de este y del cerebelo. Su libro An idea of a new Anatomy of the Brain (1811) se considera la Carta Magna de la neurología.
Dibujo a rotulador de un corte transversal del cerebro hecho por Martin Kippenberger. Su trayectoria artística está marcada por la polémica. Conseguía estar permanente en el candelero con obras como una escultura de un sapo crucificado.
Modelo de trabajo de Antony Gormley hecho a partir de un bloque de hierro. El artista inglés pretende expresar la emocionalidad del cuerpo, eje de toda su obra. A partir de él muestra nuestra relación con el entorno, cómo nos orientamos en el espacio o cómo reaccionamos cuando nos perdemos.
Dentro del cráneo se pueden generar nuevas neuronas, y hacerlo de esta forma tan bella.
Representación de las teorías aristotélicas de la conciencia, recogidas en el libro De corpore et anima en 1497.
Dibujo a rotulador de un corte transversal del cerebro hecho por Martin Kippenberger.
