Uno se va haciendo mayor cuando todos sus referentes se van yendo. Cuando eras pequeño los futbolistas que te gustaban eran señores mayores de 30 años… y ahora nosotros ya tenemos muchos más que ellos cuando se retiraron. Esa es la sensación que hemos tenido muchos hoy al conocer la muerte de Lolo Rico, la creadora y directora del programa infantil La bola de cristal, que marcó nuestros sábados por la mañana durante la segunda mitad de la década de los 80.
María Dolores Rico Oliver, que así se llamaba, ha fallecido esta madrugada por culpa de un paro cardíaco. Tenía 84 años.
En los tiempos que corren, donde los ofendidos campan a sus anchas, un programa como La bola de cristal sería imposible en nuestras televisiones. Por allí campaba gente como Alaska, Pedro Reyes, Pablo Carbonell, Loquillo, Kiko Veneno, Santiago Userón… Todo era muy loco, demasiado irreverente.
¿Alguien se puede imaginar algo así en estos momentos? Sencillamente imposible. La bola de cristal comenzó su andadura en octubre de 1984, y acabó en junio de 1988. Dijimos hola a los los electroduendes, que eran la Bruja Avería, la Bruja Truca, el Hada Vídeo, Maese Sonoro y Maese Cámara, y nos quedaron para toda la vida frase míticas como «Yo solo no puedo, con amigos sí», «Si no quieres ser como estos, lee», o «Tienes quince segundos para imaginar… si no se te ha ocurrido nada, a lo mejor deberías ver menos la tele».
Unos dicen ahora que nos adoctrinaban. Pero los que lo vivimos de lleno somo mejores por haber visto algo así, por haber madrugado los sábados y pasarlo pipa con estas locuras que a muchos nos volaban la cabeza. Aprendimos a amar la música con aquella Cuarta Parte, donde veíamos conciertos y vídeos de, entre otros, gente como Siniestro Total, El último de la fila, Los Nikis, Golpes bajos, Hombres G…
Sí, ya sabemos, cualquier tiempo pasado fue mejor, pero es que el caso de La bola de cristal fue verdad. Gracias por tanto, Lolo Rico, y buen viaje.
Vía: Esquire ES
Redacción QUO