En 2004, fue descubierta en la provincia de Shaanxi, la tumba de una gran dama bautizada como Lady Xia, de quien se dice que era la abuela de Qin Shi Huang, el primer emperador de China. Se trataba de una sepultura colosal, en la que también aparecieron los restos de varios animales, entre ellos de leopardos, osos, y este misterioso cráneo.
Todo parecía indicar que el resto perteneció a un gibón, pero a uno que no se parecía a ningún otro conocido. Ahora, un equipo de la Sociedad Zoológica de Londres, ha logrado resolver el misterio ya ha descubierto que, efectivamente se trata de un tipo de gibón completamente desconocidohasta la fecha, y ya extinto.
La nueva especia ha sido bautizada con el nombre de Junzi imperialis y, según los investigadores sería la primera variedad de primate que se extinguió tras la Edad de Hielo. En su desaparición contribuyeron factores medioambientales, pero también humanos. Porque, aunque los gibones eran muy valorados como mascotas en la corte imperial, la progresiva expansión del imperio chino fue reduciendo sus hábitats y con ellos el número de ejemplares.
Fuente: LiveScience.
Vicente Fernández López
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