¿Por qué triunfa “La Casa de las Flores? Es la telenovela millennial (del mo-men-to)

Si hay algo que puede ir mal, preocúpate, porque seguro que irá a peor. Dicen que una mentira, cuando se repite muchas veces se convierte en una verdad, o en una especie de rutina aceptada por la que parece que nadie ha roto un plato en su vida. Pero hay un punto en el que cuando la tela de mentiras comienza a romperse, acaba apareciendo la verdad… y habitualmente lo hace a lo grande. Tanto, que te explota en la cara, como le ocurre a los personajes de “La Casa de las Flores”, la telenovela que ha enganchado a miles de millennials y que se ha convertido, sin duda, en las sorpresa del verano. Ya no solo en México, donde competía con otra gran producción, “Luis Miguel: La serie”, sino en el resto del mundo. Pero, ¿qué la hace tan especial?

Si quieres éxito, vete en contra de todo lo establecido

Ha sido creada y dirigida por el joven Manolo Caro, un transgresor y valiente autor de trabajos en los que busca provocar y romper con las normas establecidas, en este caso de lo que se conoce como una producción telenovelesca. Las tramas que hasta ahora eran veladas o escondidas de la cámara en este tipo de producciones de las que se alimentan millones de espectadores, ahora se muestran a la cámara sin tapujos.

Y sus personajes son meros mensajeros. Y es que en una familia donde todo parecer rodar a la perfección, hay una oveja en el rebaño que descalabra todo y percute que la verdad salga a la luz. Mientras “Los Mora” celebran el cumpleaños del patriarca, su amante decide ahorcarse en el interior de la floristería que regentan abriendo la caja de Pandora. Este es el detonante de la serie y alrededor del cual se muestran todas las realidades de cada uno de los protagonistas (todos unos bellezones): transexualidad, bisexualidad, infidelidades, sexo explícito en cámara, relaciones abiertas, consumo y venta de drogas, delitos económicos… Todos los ejemplos que en una telenovela al uso, no resultan tan habituales.

En el elenco dos personajes toman las riendas. La mítica Verónica Castro, actriz reconocida en México por protagonizar decenas de novelas, ha vuelto a la televisión para interpretar a la matriarca de esta familia que parece desmoronarse. Romper con todas esas reglas que conlleva una telenovela es lo que más le ha costado y asegura que su papel acabará con esta temporada… en caso de que quieran hacer más.

Junto a ella, la actriz Cecilia Suárez (que interpreta a Paulina), su hija mayor y el personaje que mayor gancho tiene en la serie. Su forma de hablar monosilábicamente, de forma lenta y marcada, hace que la odies y la ames al mismo tiempo. De hecho, quienes en un primer momento se tiraban de los pelos por su manera de “platicar” de “su ma-má y su pa-pá” han acabado deseando que apareciera constantemente en escena. Tal ha sido su éxito que Netflix le ha pedido que deje de hablar de esta forma para entrevistas (como si tuviera copyright). Lo curioso es que en un primer momento ella iba a hablar sin ese deje, pero a los pocos días de comenzar el rodaje descubrieron que ralentizar su lenguaje la hacía aún más especial, por lo que sus primeras escenas tuvieron que ser dobladas.

Desde España, con amor

En nuestro país está siendo aún más noticia porque entre el elenco de personajes está Paco León interpretando el papel del exmarido de Paulina que da vida a una mujer transexual. Cuando anunció que iba a encarnar este papel, los colectivos de trans se echaron encima de él por considerar que estos papeles deberían ser interpretados por actores y actrices trans, gente que pudiera hacer una interpretación más real del personaje. Finalmente, y a pesar de que León aseguró que nunca más aceptará un papel así, el resultado ha sido más que satisfactorio y ha tratado el personaje de María José con mucho respeto.

Y a vosotros, ¿qué os parecer la serie?

Fuente imágenes: Netflix

Alberto Pascual García